Exploración y conquista "tardía" del Río de la Plata:
Primeros exploradores:
El río "ancho como mar": Solís.
A comienzos del siglo XVI, Juan Díaz de Solís, "Piloto Mayor del Reino", reconocía las costas de Brasil en busca del tan ansiado canal interoceánico. Las dimensiones del estuario platense lo confundieron: convencido de haber encontrado el camino, se adentró en el "río ancho como mar" al que bautizó Mar Dulce.
La primera escala fue en el lugar que llamó "Bahía de la Candelaria", probablemente en el emplazamiento actual de Montevideo. Más adelante ancló en la isla que denominó "San Gabriel", frente a lo que hoy es Colonia. Allí quedaron dos de sus naves, mientras él continuó río arriba hasta otra isla, que recibió el nombre de Martín García en honor a uno de los tripulantes que murió allí. Con solo cincuenta hombres desembarcó en tierra firme, cerca de la zona de Carmelo. Allí fue atacado por los nativos y -según testimonio de los sobrevivientes- devorado por ellos. Aunque la tradición atribuyó este episodio a los charrúas, sus autores fueron los guaraníes, quienes, como se sabe, practicaban la antropofagia.
El piloto desobediente: Gaboto
Con la mira aún puesta en Oriente salió Sebastián Gaboto del mismo puerto sevillano, para cumplir el encargo real de volver "cargado de especias, piedras preciosas, oro y seda". Recaló en las costas de Brasil, a la altura de Pernambuco, en 1525. En aquella pequeña población fundada por los portugueses y en contacto con algunos sobrevivientes de anteriores expediciones, tuvo noticia de fabulosas riquezas que aguardaban en algún lugar del continente. Decidió entonces cambiar el objetivo que le había sido encomendado por el rey y explorar la región en busca de la legendaria "sierra de la plata" que todos evocaban.
Entre 1526 y 1527 remontó el curso del Río de Solís -al que rebautizó "Río de la Plata" en virtud de la ilusión perseguida- y también parte del Paraná
La primera vuelta al mundo: Magallanes.
En enero de 1520, al llegar al "Río de Solís", la magnitud del estuario también confundió la pupila del experto marino, aunque pronto constató el error y viró al sur. Finalmente, en la primavera de ese año, cruzó el canal que hoy lleva su nombre camino a la codiciada Especiería, donde encontró la muerte a manos de los lugareños. Su segundo de a bordo -Sebastián Elcano- logró culminar la expedición tras incontables penurias, arribando a España el 7 de setiembre de 1522.
Conquista "tardía"
Postergada en el tiempo, con respecto a la iniciación de las conquistas anteriores, la Conquista del Río de la Plata se inicio hacia 1534. La exploración en principio de un canal interoceánico (Atlántico-Pacífico) y más tarde la búsqueda de la Sierra de Plata fueron los motores que movilizaron hombres a través de las sierras, selvas y violentas poblaciones indígenas de la región. La idea era remontar los ríos Paraná y Uruguay hasta Paraguay, para desde allí llegar a los lugares donde supuestamente se hallaban las riquezas.
Acción de los adelantados y las primeras fundaciones.
La conquista de la región platense estuvo en manos de cuatro adelantados: